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Módulo 2: Herramientas de evaluación dietética

Resultados del aprendizaje

  • Es importante utilizar la herramienta de evaluación dietética que sea la más apropiada para el nutriente o los nutrientes que nos interesan en la población estudiada.
  • Idealmente, se debería validar la herramienta confrontándola con un parámetro independiente. Podría ser un agua doblemente marcada si se evalúa la ingesta de energía, u óxido de deuterio si se evalúa la ingesta de agua o líquidos.
  • Ya disponemos de herramientas específicas para evaluar líquidos que fueron validadas de esta manera.


Las evaluaciones dietéticas pueden ser retrospectivas, es decir acerca de lo que se ha consumido, o prospectivas, es decir con un registro llevado a cabo durante el consumo -o lo más cerca que se pueda del consumo. En epidemiología, las herramientas retrospectivas más comunes son los recordatorios de 24 horas (cuestionarios sobre consumo en las últimas 24 horas) y los cuestionarios de frecuencia alimentaria; el registro diario de comida, por peso o estimada, son las herramientas prospectivas más utilizadas. Cada herramienta tiene ventajas y limitaciones inherentes que hay que tomar en cuenta para determinar cuál es la más adecuada según el uso que se le quiere dar (Welch, 2019). Hay que convalidar la herramienta escogida confrontándola con un parámetro independiente, si se dispone de uno, para el o los nutrientes por evaluar, idealmente en la población estudiada. Por ejemplo, se puede convalidar la ingesta de energía usando agua doblemente marcada (Black et al., 1993).

Hasta hace poco, la toma de agua y de otros líquidos no se evaluaba de manera rutinaria en los estudios de población. Sin embargo, a la par del reconocimiento creciente de la importancia de una hidratación saludable y de su vínculo con la salud y ciertas enfermedades, muchas encuestas nacionales están evaluándola ahora (Gandy et al., 2016). No obstante, existen evidencias que muestran que las herramientas disponibles no recogen todo el espectro de la toma de líquidos (Bardosono et al., 2015; Gandy et al., 2016). Se desarrollaron varias herramientas específicas para evaluar la ingestión de agua y de líquidos en diferentes poblaciones, como por ejemplo Ferreira-Pêgo et al., 2016; Jimoh et al., 2015. Sin embargo, une estudio sistemático reciente (Grummon et al., 2018) encontró que la mayoría de estudios de consumo de agua o líquidos no evaluaban su validez ni su confiabilidad. El primer estudio que convalidara una metodología de ingesta de líquidos al confrontarla con un parámetro independiente fue publicado en 2018 (Johnson et al.)

Convalidó un diario o registro específico de líquidos en el agua corporal total con rotación de 7 días, usando el óxido de deuterio como parámetro de validación y mostró en ambos una buena validez y confiabilidad. Esta metodología se aplicó de manera constante en el estudio Liq.in7 (https://www.hydrationforhealth.com/en/hydration-science/liqin7/), lo que permitió arrojar una evaluación más precisa de la ingesta total de líquidos y de los diferentes tipos de líquidos. Más recientemente, un cuestionario de frecuencia de uso de agua, con 17 clases de líquidos, también fue validado con óxido de deuterio. Arrojó una alta consistencia interna y una buena confiabilidad. Este puede proveer una herramienta práctica y fácil de usar para evaluar la toma de líquidos.


Referencias

Bardosono S, et al. (2015) Total fluid intake assessed with a 7-day fluid record versus a 24-h dietary recall: a crossover study in Indonesian adolescents and adults. Euro J Nutr 54(S2): 17-25.

Black AE, et al. (1993). Measurements of total energy expenditure provide insights into the validity of dietary measurements of energy intake. J Am Diet Assoc 93:572–579.

Colburn et al. (2019) Validation and reliability of a water frequency questionnaire to estimate daily water intake in adults (P13-006-19). Curr Dev Nutr 3(S1):P13-006-19.

Ferreira-Pêgo et al. (2015) Beverage intake assessment questionnaire: relative validity and repeatability in a Spanish population with metabolic syndrome from the PREDIMED-PLUS Study. Nutrients 30(8):piiE475.

Gandy J, et al. (2016) Recording of fluid, beverage and water intake at population level in Europe. Brit J Nutr 116:677-682.

Gandy J, et al. (2016) Relevance of assessment methods for fluid intake. Annals of Nutrition & Metabolism 68(suppl 2):1-5.

Grummon et al. (2018) Measuring beverage consumption in US children and adolescents: a systematic review. Obesity Reviews 19 (S1):1017-1027.

Jimoh et al. (2015) Assessment of a self-reported drinks diary for the estimation of drinks intake by care home residents: Fluid Intake Study in the Elderly (FISE). J Nutr Health Aging 19(5):491-6.

Johnson E et al. (2017) Validation testing demonstrates efficacy of a 7-day fluid record to estimate daily water intake in adult men and women when compared with total body water turnover measurement. J Nutr 147 (10):2001-2007.

Welch A (2019) Dietary assessment. In Manual of Dietetic Practice 6th Edition. Ed J Gandy. Oxford: Wiley-Blackwell.

Capítulo 1: Panorama de los cuestionarios dietéticos
6min
Beginner
Capítulo 2: Análisis de los datos recolectados
4min
Beginner
Capítulo 3: Retos al evaluar la ingesta de líquidos
4min
Beginner
Capítulo 4: Evaluación de la ingestión de líquidos, metodología validada
3min
Beginner